martes, 20 de enero de 2009

SER UN DISCÍPULO DE CRISTO

“Id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo” (Mateo 28:19.)

Cuando Jesús dejó la orden de ir y hacer discípulos se refería a hombres y mujeres consientes que deberían arrepentirse de sus pecados; hacer una verdadera conversión, confesar que Cristo murió en la cruz por ellos, y aceptarlo como su Salvador. Esto define ser un discípulo (Mateo 3:8; 1ª Corintios 2:2). Luego el bautizarse en agua por inmersión es un testimonio público, apartado del mal, caminando en dependencia de Dios. Además esta señal significa: morir al mundo para estar unido a Jesús, afirmando que Dios es su Padre, que Jesucristo es su Salvador y que el Espíritu Santo es su guía en la verdad de la palabra.

El hecho de bautizar a un niño con un poco de agua rociada en la cabeza no garantiza la salvación de una persona. Cuando el niño está siendo bautizado, no es consciente de su pecar, por lo tanto no es capaz de declarar su verdadera fe en Cristo para el perdón de sus pecados y en tal estado es imposible llegar a ser un discípulo de Jesucristo ¿Cómo se lo evangelizaría para su arrepentimiento, si es un niño? ¿Para qué se lo bautiza, si Jesús dijo que "de los tales es el reino de Dios"? (Colosenses 2:8; Efesios 4:14; Marcos 10:13-16).

En cambio, Dios si quiere que usted consciente de sus muchos pecados se arrepienta, por fe confié en el sacrificio de su Hijo, clamando perdón y en adelante hable de Jesús diciendo: que en la cruz derramó su sangre para el perdón de sus pecados, quien ahora es su Señor (Romanos 10:9-10).
Tenga en cuenta que en el momento de aceptar a Cristo como su salvador, viene hacer bautizado con el Espíritu Santo; luego se bautiza en agua. En adelante, leer la Biblia lo capacitaría no solo en el conocimiento de la palabra, sino para practicarla e ir "y hacer discípulos a todas las naciones bautizandolas..." (Mateo 28:19; Marcos 1:8;2; Efesios 1:13; Timoteo 3:16,17;).

No hay comentarios: